Programa de prevención de riesgos en las redes sociales para adolescentes de secundaria: ciberbullying

Abstract

En primer lugar, es necesario mencionar un concepto con el que a lo largo de la elaboración de la investigación me fui topando que es la penetración digital que, de acuerdo con Salvatella (2015) se refiere a cómo la evolución de la tecnología ha propiciado una expansión y fácil acceso a estas herramientas, con el desarrollo de funciones más sofisticadas, lo que trae consigo una conexión permanente a las TICs. Ahora es casi impensable un lugar que no cuente con conexión a internet o que no exista un dispositivo electrónico con conexión a esta, incluso, ya existen electrodomésticos con este tipo de funciones. Este mismo autor menciona que es importante entender que la relación que tienen los niños, niñas y adolescentes con el mundo digital es muy diferente a cómo los adultos nos relacionamos con estas herramientas. Al venir de otras generaciones, es necesario capacitarnos porque la tecnología no va a irse, por el contrario, continuará con nosotros y con ello, seguirán llegando nuevos retos. Uno de ellos, en el cual podemos incidir, es la manera en la que nos vinculamos con este mundo digital; es necesario para poder acompañar a los más pequeños en el desarrollo de competencias que les ayude a enfrentar este mundo, lleno de constante transformación y avance tecnológico. De acuerdo con Grané (2015) la familia es el principal entorno de aprendizaje para los niños por lo que, si tenemos o tomamos actitudes negativas o muy permisivas en cuanto al uso de la tecnología, ello sirve de ejemplo para los más jóvenes, por lo que determinará o influirá en la manera de actuar y de usar estas herramientas. Con la información obtenida durante la realización del diagnóstico pude darme cuenta de cómo, a veces, los adultos proporcionamos sin medida estas herramientas, contamos con ellas, se encuentran en casa, pero no se realiza un uso crítico o reflexivo de lo que podría ocurrir si no acompañamos en el uso de estas. Lo cual resulta preocupante porque en muchos casos dejamos que estas herramientas realicen el papel de cuidado o distracción, sin tomar un papel activo en la forma en la que las niñas, niños y adolescentes, pueden utilizar estos recursos. Otro punto muy importante de lo planteado en el diagnóstico, en específico, lo realizado con adolescentes, es el análisis de las posibles conductas de ciberbullying realizadas, por el hecho de proporcionar dispositivos electrónicos sin medida y sin la existencia de supervisión por parte de padres, tutores o cuidadores primarios. Dentro de estas conductas, están aquellas relacionadas a la difusión de información personal así como contenido íntimo o incluso vivencia de acoso sexual por medios digitales, esta visión es importante de reflexionar ya que son acciones realizadas por adolescentes con edades de entre 12 a 17 años. Lo anterior, resulta difícil o más bien, imposible de obviar considerando las afectaciones, que este tipo de acciones, puede generar en cuestión de salud física, mental o emocional de los NNA. Es necesario entender, que este fenómeno y otras conductas de riesgo, no sólo se quedan en el ámbito digital, traspasan las pantallas y el menoscabo es real para la vida de la persona. También, es necesario dar el peso que se merece a las actualizaciones en este tipo de temas, hacer partícipes a los adultos pero también a los adolescentes para no sólo conocer su perspectiva sino las acciones que ellos pueden realizar para combatir estas problemáticas. Finalmente, en cuestión legal y legislativa, considero que es de mucho avance la realización de este tipo de investigaciones en el Estado, a pesar de tener volúmenes de información sobre estos fenómenos es necesario tener un panorama actual y lo más acercado a la realidad, de cómo los adolescentes yucatecos están viviendo estas expresiones de violencia digital. Principalmente, por las reformas en materia legislativa, que a pesar de sustentarse en instrumentos e información nacional, es necesaria la perspectiva de vivencia de ciberbullying en el Estado; con el fin de tener respuestas efectivas para trabajar con los adolescentes involucrados.