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dc.contributor.authorFIGUEROA FRANCO, SOCORRO
dc.date.accessioned2021-05-17T17:28:07Z
dc.date.available2021-05-17T17:28:07Z
dc.date.issued2014-09-19
dc.identifier.urihttp://redi.uady.mx:8080/handle/123456789/4496
dc.description.abstract"Los niños en edad escolar, comparten nuevas experiencias sociales con todas las personas que los rodean, es en esta etapa que los alumnos requieren desarrollar conductas sociales positivas (Romera, et al, 2008). La socialización positiva se refiere al conjunto de conductas de ayuda a los más vulnerables, con acciones de ayuda y preocupación por los demás (Rudolph, 2000). Partiendo del punto anterior, se puede afirmar que las conductas sociales positivas, pueden beneficiar la convivencia y el desarrollo de la socialización, así como el respeto a las diferencias y diversidad del alumnado. Un aspecto relacionado, con la ayuda a los más vulnerables y la atención a la diversidad, es el de la inclusión educativa, pues parte de la premisa de realizar una escuela para todos, es decir la creación de espacios en los que se promueva la convivencia y la aceptación a las diferencias, tomando en cuenta las necesidades de cada uno de los alumnos. En el Plan de estudios de educación básica actualmente, se menciona el principio de inclusión, en el que se haga énfasis en que la diversidad es un punto de enriquecimiento para todos (SEP, 2011). Bajo la perspectiva anterior, se propuso como objetivo del presente trabajo promover la socialización positiva en un grupo de primaria con inclusión educativa de una escuela Montessori. La investigación que se realizó, fue empírica cuantitativa tradicional, de campo y aplicada. El diseño es de un solo grupo, con dos mediciones pretest-postest. En esta investigación participaron 20 alumnos pertenecientes a cuarto, quinto y sexto grado de primaria, todos de un grupo de una escuela con metodología Montessori ubicada en la ciudad de Mérida, Yucatán. Los alumnos se encontraban en un rango de edad entre 9 y 12 años, cabe mencionar que el grupo presentaba características muy diversas en el alumnado, debido a que parte de los integrantes presentaba una necesidad educativa especial. A su vez también participaron cinco docentes del centro educativo, involucrados en las actividades escolares de los alumnos del grupo. El grupo fue evaluado en socialización, mediante la aplicación de la Batería de Socialización BAS-3 de Silva y Martorell (1987) que permite establecer un perfil del niño en cinco escalas. Los resultados de la BAS-3, reflejaron que cinco sujetos de la muestra tuvieron un puntaje inferior a 2.5 (valor medio de la escala) en la dimensión Consideración con los demás (Co), es decir, estos alumnos tenían poca sensibilidad social o preocupación por los demás. Por otro lado, se aplicó la Guía de Evaluación de Prácticas Inclusivas en el Aula en sus versiones de autorreporte y observación de García, Romero y Escalante (2009), que permitieron medir los niveles de inclusión educativa en el grupo, los resultados determinaron que al menos cuatro docentes tuvieron un puntaje inferior al valor medio de la escala de 2.5, específicamente en el área de planeación. Tomando en cuenta los resultados de ambos instrumentos, se procedió a diseñar un programa de intervención, basado en la propuesta de Garaigordobil para favorecer las conductas prosociales. La intervención con los docentes, se realizó mediante la toma de decisiones conjunta para elaborar planeaciones acordes a las necesidades del alumnado. Al finalizar la intervención, se evaluó nuevamente al grupo para conocer si hubieron o no cambios estadísticamente significativos, mediante la prueba no paramétrica de Wilcoxon utilizando el software Stadistical Package for the Social Sciences (SPSS). Los resultados indicaron que se favoreció la socialización positiva de manera estadísticamente significativa con una p=.000, de manera especial se incrementaron las conductas de ayuda a los demás, en aquellos alumnos que habían obtenido en el pretest los resultados más bajos. Por otro lado también se mejoró la planeación docente, para procurar un ambiente más inclusivo en el grupo. Se concluye que es posible incrementar los niveles de socialización positiva en un grupo con inclusión educativa, mediante una intervención como la descrita en la presente investigación."en_US
dc.description.sponsorshipJORGE CARLOS AGUAYO CHANen_US
dc.language.isoesen_US
dc.publisherUNIVERSIDAD AUTÓNOMA DE YUCATÁNen_US
dc.subjectsocialización positivaen_US
dc.subjectprimariaen_US
dc.subjectinclusión educativaen_US
dc.titleSocialización positiva en un grupo con inclusión educativa de una primaria Montessorien_US
dc.typeThesisen_US


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