La plaza central de las ciudades pequeñas de Yucatán es un espacio público abierto que cumple varias funciones urbanísticas. A pesar de su modesta apariencia se trata de un lugar complejo cuyos componentes tangibles e intangibles están relacionados de manera subjetiva. Constituye un paisaje urbano emblemático. Para su comprensión se analizan los edificios más sobresalientes de sus alrededores, se describe la forma cotidiana que es utilizada para la convivencia y el paseo. Así como los eventos más significativos de la localidad, con raíces que se remontan al periodo colonial. Fueron detectadas algunas amenazas de la modernidad que minan algunas de sus capacidades históricamente heredadas como la simbólica e identitaria. Ante lo cual, se sugiere que un rescate de la plaza central desde una perspectiva paisajística contribuiría al fortalecimiento de la identidad comunitaria, entre otras ventajas.