Se diseñó un semáforo a base de Diodos Emisores de Luz que emiten en los tres colores básicos de los semáforos tradicionales y tres colores adicionales para implementar flechas de señalización que dependen de la polarización del diodo. Con este diseño se logró un 28% de ahorro en el consumo de energía con respecto a los convencionales LEDs, con un gasto energético de 0.7 amperios para 12 voltios de DC. Asi también, se añadieron tres colores para ayudar a las personas con discapacidad visual. Durante la implentación del dispositivo electrónico se logró detectar a dos personas con tendencias daltónicas y varias con problemas visuales de enfoque.