Actualmente, en México el abuso de las drogas constituye un complejo fenómeno con consecuencias negativas a nivel individual, familiar y social. Mérida (Yucatán) no es la excepción, por lo que distintas organizaciones y el gobierno local atienden dicha problemática a través de diversos programas sociales, sin embargo se carece de evaluaciones a éstos. Plantearse la posibilidad de evaluar los programas sociales es una alternativa que intenta ganar terreno, suplantando políticas y metodologías tradicionalistas (Mercado-Martínez, Bosi y Hernández-Ibarra, 2010), ya que contribuye a tomar decisiones adecuadas para desarrollar acciones pertinentes. Este trabajo se centra en la evaluación de la percepción de utilidad a nivel individual de un programa social centrado en el manejo terapéutico médico-psiquiátrico, psicológico y social, en personas que consumen drogas; implementado por Centros de Integración Juvenil Asociación Civil, en Mérida, Yucatán, México, desde la experiencia de sus involucrados. La metodología utilizada fue de corte cualitativo fenomenológico con técnicas de observación participativa, entrevista semi-estructurada y análisis documental. Participaron seis asistentes, dos exasistentes, el director de la organización, los coordinadores y la responsable del programa. Los resultados discuten la evolución sociofamiliar y laboral de los asistentes, abordando aspectos relacionados con la calidad de sus relaciones, el papel de la comunicación, el uso del tiempo libre y la inserción a nuevas actividades socioeducativas. Adicionalmente se analizan diferentes aspectos del programa como el cumplimiento de los objetivos y el papel de los responsables, situación que permitió reconocer aciertos y desaciertos en el programa con miras a favorecer procesos de toma de decisión encaminados a la mejora.