El objetivo es contribuir a la comprensión del modo en el que familias de la ciudad de Mérida, Yucatán, México, han percibido la evolución de sus modos de alimentación a partir de la filtración de la globalización en su vida cotidiana. Metodología. Participaron nueve personas de distintos tipos de familias y estratos socioeconómicos para indagar los significados que dan a la alimentación y la comida, mediante una metodología cualitativa, realizando entrevistas abiertas y observaciones directas. Resultados. Expresan la forma en la que los meridanos han integrado los alimentos procesados exponiendo los factores socioeconómicos que perciben como los detonantes de esos cambios. Limitaciones. Se describen las consecuencias de carácter psicosocial que estos cambios han traído las cuales se centran, en primera instancia, en la incertidumbre sobre lo que es sano consumir y, por otro lado, la nostalgia por aquello que se consumía con anterioridad. Conclusiones. Se puede argumentar que, en materia de alimentación, las familias han tenido que adaptarse de manera creativa, para sobrevivir en el mundo globalizado y que, de cierta manera, se ha dado un constante alejamiento de las tradiciones culinarias, debido principalmente a aspectos socioeconómicos. De igual modo, el discurso social de lo que es sano ha modificado parcialmente las dietas tradicionalmente yucatecas para comenzar a adaptarse a un patrón
homogeneizado de lo saludable.